En últimos siete meses Estación Central cobró $476 millones por permisos de 10 mega edificios

Por Patricio Pino, La Segunda

Pocos días después de que el intendente de Santiago, Claudio Orrego, hizo estallar la polémica por los «guetos verticales» de Estación Central, el alcalde de esa comuna, Rodrigo Delgado, anunció que congelaría los permisos de edificación mientras tramitaba el primer plano regulador comunal (PRC), con la idea de que las alturas máximas fueran de 15 pisos en la Alameda, la arteria central de la zona.

En los últimos meses, sin embargo, la tramitación de permisos para edificios seguía su curso. Según la página de Transparencia del municipio, desde agosto de 2016 hasta febrero de 2017 —último mes del que hay información disponible— la Dirección de Obras Municipales (DOM) aprobó 10 permisos de edificación, por los que recibió $428 millones en derechos municipales. Además, validó otras 14 solicitudes entre anteproyectos y modificaciones de anteproyectos, totalizando ingresos por $476 millones. A modo de comparación, las entradas percibidas por Estación Central según la Subdere fueron de $22.806 millones en 2016.

Esto, mientras que desde abril del año pasado el seremi de Vivienda, Aldo Ramaciotti, ordenó a la DOM no seguir autorizando megaproyectos habitacionales ante la inexistencia de un plano regulador. Desde la seremi se explicó que estos permisos de edificación otorgados después de abril “por regla general no aplican para los casos que cuentan con anteproyectos aprobados antes de la fecha de emisión de la Circular Minvu que limitó la edificación en altura en abril del 2016”.

En estos siete meses, Estación Central ha aprobado permisos de edificación que suman 4.846 departamentos y 1.270 estacionamientos. Y si a ellos se agregaran los anteproyectos y modificación de anteproyectos (están aprobados pero en una fase preliminar), la comuna tendría en total 10.182 departamentos y 3.130 estacionamientos nuevos.

Los permisos de edificación los concentra la firma SuKsa (3), con autorización para picar en calles Recreo, General Amengual y Conde del Maule. Su edificio más bajo tiene 33 pisos de altura. Esta empresa tiene una construcción en calle María Rozas, ex Las Rejas norte, donde inició la polémica de los «guetos verticales» por la foto que publicó el intendente.

“Faltó coordinación”

“Esas calles tendrán un cambio del cielo a la tierra”, dice el ex subsecretario de Transportes Cristián Bowen, que proyecta lo que pasará con la llegada de los nuevos residentes. “Aunque el edificio tenga pocos estacionamientos, si por ejemplo tiene 4 mil departamentos, son al menos 8 mil personas que tendrán que caminar por ahí, a las que las personas que las quieran visitar tendrán que estacionar en la calle. Aquí faltó coordinación y la regulación fue laxa”, dijo.

A su juicio, la proporción reducida de estacionamientos ante el número de departamentos se puede explicar porque así se evitan estudios de impacto sobre el transporte urbano (EISTU), cuyas proyecciones conducen a tener que plantear mitigaciones en la vialidad. “Esto es algo que ahora no pasará con la ley de aportes, que al momento que empezaron a tramitarse estos permisos no estaba vigente”, dijo.

El director del Observatorio de Ciudades de la U. Católica, Roberto Moris, dijo que lo que ocurre en Estación Central “es el peor caso que tenemos en Santiago, como un mundo de Gulliver y en ello la autoridad municipal tiene una altísima responsabilidad”. Añadió que el hecho que haya edificios en calles menores “es un ejemplo del cruce de mala planificación urbana y demanda inmobiliaria fuerte.”

Moris estima que hay irregularidad, “pero no de tipo legal, sino ético. También está el problema que no existe un marco legal que ponga un mínimo al tamaño de un departamento. Es el far west. Estos barrios ya quedaron con un alto nivel de carga y no sabemos cuál será la capacidad de mantención de esos edificios”.

El alcalde de Estación Central, Rodrigo Delgado, declinó referirse al tema, pues estar tarde tendrá una reunión con el seremi de Vivienda.