Profesor Horacio Torrent asume como miembro del Advisory Board de Docomomo Internacional

16 de Septiembre 2019

Docomomo International tuvo su origen en 1988 en la Universidad Tecnológica de Eindhoven, Holanda, a partir de una investigación que se propuso la conservación de los edificios de la arquitectura moderna.

El establecimiento del Grupo de trabajo significó un avance efectivo en el campo del inventario, documentación y preservación de los edificios, sitios y barrios más importantes del Movimiento Moderno. La función básica de Docomomo es la de cooperar con organizaciones oficiales y voluntarias en la consolidación de los principios fundamentales de la Declaración de Eindhoven que fuera divulgada como conclusión de la Conferencia fundacional y que ha sido revisada en Seoul 2014, incorporando el re-uso adaptativo como paradigma de la conservación, así como las nociones de sustentabilidad patrimonial y de extensión y vigencia de los argumentos de la arquitectura moderna. Se conforma, así, una red sustentable para el intercambio de experiencias y know-how entre especialistas, así como también la posibilidad de llamar la atención pública en torno al significado y valor de esta área del patrimonio cultural.

Al momento Docomomo International tiene 76 Grupos de Trabajo activos en más de 70 países, y 6 comités especializados en: Registro e Inventario, Tecnología, Educación y Teoría, Urbanismo y Arquitectura de Paisaje, Diseño Interior. Pueden ser miembros de la organización arquitectos, urbanistas, ingenieros, historiadores, administradores públicos, conservadores, profesores, académicos y todos aquellos que aprecien las ideas detrás del Movimiento Moderno.

Así se explica, por sí misma, la gestión internacional de Docomomo (www.docomomo.com), institución en cuyo consejo asesor (Advisory Board) acaba de ser nombrado el profesor e investigador de la escuela de Arquitectura, Horacio Torrent.

Conversamos con el profesor Torrent respecto de su nombramiento, los principales desafíos y funciones y de lo que significa esta instancia para la escuela y la Facultad en general.

¿Cómo se produjo tu nombramiento y cuál es el rol del Advisory Board en Docomomo Internacional?

HT: Es un nombramiento hecho por votación unánime para la renovación de este consejo, que se hace en el Comité Internacional del organismo, con sus 76 países representados. Nos integramos el portugués João Belo Rodeia y yo a este nuevo recambio.

El Advisory Board de Docomomo es un consejo permanente a la gestión institucional, que, por lo general, integran personas que han participado antes de la gestión institucional y/o que han participado de iniciativas de interés para Docomomo Internacional.

Tenemos misiones claras y diversas. La más próxima es la búsqueda de la próxima sede internacional de Docomomo ya que se cumple el período de estadía en el Instituto Técnico Superior de Lisboa, como antes estuvo en la Fundación Mies Van der Rohe en Barcelona, en la Cité de l’Architecture et du Patrimoine, en París, en la Universidad Tecnológica de Delft, o en la Universidad Tecnológica de Eindhoven en sus inicios.

¿Qué significa para ti en lo personal integrar el Advisory Board de Docomomo?

HT: Es un reconocimiento a las labores institucionales que he desarrollado en apoyo a Docomomo en los Comités Científicos de las Conferencias Internacionales desde 2008, y por dirigir uno de los capítulos nacionales más activos, e incluso con la organización de un Seminario internacional organizado en Chile el año pasado, con éxito en convocatoria e impacto en la región, para situar en el debate a las prácticas de conservación y restauración, pero también a las de gestión patrimonial y al valor de la intervención proyectual de la obra nueva en relación a la obra patrimonial.

¿Qué misión cumple el Advisory Board de Docomomo?

HT: Asesorar de manera permanente la gestión institucional. Por ejemplo, cada vez que cambiamos de sede para reunirnos, cambian las normativas y estructuras de acuerdo a las legislaciones de cada país, y cautelar y velar porque cada edición se ajuste a los lineamientos de cada país y a su ordenamiento institucional.

Asimismo, asesoramos a los comités científicos de diversas áreas de Docomomo, como son el de Registro del Patrimonio Moderno a nivel Mundial; el de Tecnología; el de Urbanismo y Paisaje; el de Educación y Teoría; el de Diseño Interior; y uno de Publicaciones.

¿Cómo la escuela de Arquitectura y la Facultad en general debería aprovechar este nombramiento y tu presencia en este organismo?

HT: Es importante ser miembro, porque geográficamente estamos lejos de los lugares donde normalmente ocurren las convenciones. Por eso deberíamos aprovechar al tener un representante en el Advisory Board y reivindicar más la investigación, publicaciones y gestión que tenemos en torno al patrimonio que hay en nuestro país, y en particular de nuestra universidad. Desde hace casi 10 años, Sudamérica no tenía representación en el Consejo Asesor, un lugar que había sido ocupado tradicionalmente por Brasil.

Si bien el cargo es personal, por cierto, hay que reconocer que se debe al trabajo conjunto de muchos otros miembros de Docomomo Chile, sobre todo en términos de registro de patrimonio y las intervenciones sobre patrimonio, por lo tanto, debemos también aprovecharlo como una plataforma para poder mostrar a la comunidad internacional cómo nos preocupamos en Chile por la gestión del patrimonio moderno, a la vez que profundizar nuestra tarea con los otros grupos de trabajo de Latinoamérica.

INFORMACIÓN PERIODÍSTICA
JUAN ANDRÉS INZUNZA