Deficit habitacional e industrialización de la madera: Decano Mario Ubilla y representates del CENAMAD, se reunieron con el Ministro de Vivienda y Urbanismo, Carlos Montes

3 de Mayo 2022

Hasta las dependencias del Ministerio de Vivienda y Urbanismo (MINVU) llegó el Decano de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Estudios Urbanos UC, Mario Ubilla, para sostener una reunión con el ministro Carlos Montes y el jefe de la División Técnica del MINUV, Ricardo Carvajal, junto al presidente de CORMA y académico de la escuela de Arquitectura UC, Juan José Ugarte, y representantes del Centro de Innovación en Madera (CIM UC) y el Centro Nacional de Excelencia para la Industria de la Madera (CENAMAD).

La ocasión, en palabras del Decano Ubilla, sirvió para conversar sobre la industria en Chile y analizar opciones para la construcción en madera, con miras a contribuir al combate del déficit habitacional imperante en el país y también a generar obras urbanas y otras iniciativas.

“Fue una oportunidad muy grande e importante, que del MINVU haya interés por el tema de la madera, un interés legítimo por parte del ministro Montes, que tiene que ver no solo con su materialidad pensando en futuras viviendas que permitan ayudar a reducir el déficit habitacional existente en el país, sino también con las excelentes propiedades de la madera, que facilita también una acción fundamental del Estado para, por ejemplo, la industrialización de la vivienda, y es notable que el ministro haya hecho hincapié en ello y le esté dando valor a la producción seriada de viviendas”, expresó el Decano Ubilla.

Sobre esta reunión y sobre el estado actual y proyecciones de la construcción en madera en Chile, conversamos con el Decano Ubilla para conocer sus impresiones.

¿Por qué pareciera ser que la construcción en madera, en materia de vivienda social, recién está comenzando a ocupar espacio en la agenda pública?

MU: La madera originalmente siempre fue asociada a lo precario, a una vivienda autoconstruida y de escasa calidad, por lo que la construcción en madera fue muy desprestigiada por mucho tiempo. Hoy sabemos que las capacidades de la madera permiten construir pensando en viviendas de emergencia y también en viviendas definitivas, con una ventaja en la inmediatez de la construcción, para responder más rápido, y con un sentido del diseño arquitectónico que permite también entregar confort por la vía de la belleza de la vivienda en sí misma. 

Sobre lo último, ¿qué valor asigna usted al proyecto de arquitectura en el área de la construcción en madera, específicamente enfocada en la vivienda social?

MU: Podría recordar, a modo de ejemplo, una visita que hicimos alguna vez a Suecia, país en que la elegancia y belleza son parte importante de la construcción en madera, y se asumen como un valor intrínseco de la construcción de la madera, y en ese sentido, evaluar la calidad del diseño debe ser un aspecto fundamental, es decir, tanto como la materialidad, darle la mayor importancia al proyecto de arquitectura, para asignar valor a la construcción, para generar sentido de pertenencia, confort y emoción. El valor de la construcción en madera debe ser analizado desde todos sus aspectos técnicos, pero también desde la belleza del proyecto.

¿Cómo podría aportar, en términos cuantitativos, la construcción en madera al combate del déficit habitacional existente en el país?

MU: Quienes estamos en el rubro de la madera creemos y sabemos que Chile está en condiciones de construir alrededor de 50 mil viviendas por año. En este sentido, por ejemplo, construir vivienda social en madera podría hacerse tanto en el contexto urbano como rural, y no solo viviendas, porque también hay muestras de que la calidad de la madera en construcciones de diseño urbano es posible, y la madera despliega una gama amplia de posibilidades que satisfacen muchas necesidades, en cuanto a terminaciones y detalles constructivos. La madera hoy tiene procesos químicos que la hacen perdurar tal cual perdura una piedra, por lo tanto, es un material noble que está en condiciones de ser aprovechado.

En este sentido, la velocidad de construcción en madera es un valor increíble. En procesos de construcción es varias veces más rápida que otros materiales. Recuerdo algunas viviendas que construimos post terremoto, por la vía de un sistema de modulación, de 48 metros cuadrados, cuyo proceso de producción y fabricación demoró 12 días, lo que se suma al proceso de instalación de alrededor de 20 días. Estamos hablando de procesos más baratos y rápida construcción, lo que permitiría avanzar rápido y paliar el déficit.

Recientemente, Techo ha dado a conocer un estudio que estima que el déficit habitacional en Chile supera las 600 mil unidades de vivienda, situación que agrava y profundiza el allegamiento e incrementa el número de campamentos en el país.

Por lo anterior, se hace indispensable para el Estado de Chile, a través del Ministerio de Vivienda y Urbanismo, diversificar los mecanismos de acceso a la vivienda y acelerar procesos de construcción y edificación. En este sentido, la madera se erige como un material noble, de mucha versatilidad y que hoy en Chile está en condiciones de entregar soluciones habitacionales definitivas en tiempos más cortos y con altos índices de confort, tanto en el diseño exterior como en sus terminaciones interiores.

INFORMACIÓN PERIODÍSTICA
JUAN ANDRÉS INZUNZA